La casa en el árbol: columna de opinión de Carlos Bustos presidente Multigremial de Osorno

El presidente Multigremial de Osorno, comparte sus reflexiones sobre el proceso constituyente. Revisa los detalles en la columna de opinión.

Desde el 1800 se han desencadenado una serie de hecho sociopolíticos que han provocado una simbiosis catatónica de nuestro país, con violencia y con poca visión de futuro. 

Con liderazgos que no están en sintonía con los deseos de la gran mayoría de  los chilenos para sostener los sueños de un país desarrollado, tranquilo, en constante crecimiento, con igualdad, reconociendo el trabajo y esfuerzo de todas las clases sociales, sin dividir ni menospreciar a la familia como el núcleo esencial de la vida. 

Sin embargo, debimos aguantar la extorsión del acuerdo del 15N, la creación de una Convención Constitucional que fue tomada por los deseos de la ultra izquierda,  y jibarizó temas como la plurinacionalidad, el sistema judicial con justicias paralelas, el reconocimiento de pueblos originarios y la autonomía de cada uno de ellos.

Así como también la puesta en marcha de un sistema que frenará el desarrollo, al ser éstos a los cuales se les debe pedir el consentimiento para autorizar proyectos que generen productividad en las regiones, sin mencionar otros que son tan importantes como libertad de los padres sobre la enseñanza de sus hijos, con limitaciones al derecho a la educación y a la libertad religiosa. 

Este texto, que tienen en sus manos, en vez de unirnos como país no ha dividido peligrosamente, ya que debemos votar este 4 de septiembre por un Apruebo o Rechazo de dicha propuesta constitucional.

Desde esta tribuna sólo queremos hacer un llamado a que cada gremio y ciudadano que la compone se comprometa personalmente por poner sobre su análisis el bien común, considerando el desarrollo humano, social e integral para los chilenos, no para algunos, sino para todos.

No soñemos con la casa en el árbol, con la escalera de cuerda y con las comidas que sólo a mi más me gustan, si ni siquiera podemos construir una casa para todos.

Estamos seguros, que esta casa, deberá seguir construyéndose con derechos sociales y lo mejor para nuestro país, ya que la discusión política continuará una vez realizado el plebiscito, para aprobar para reformar o rechazar para reformar. La salida depende de los líderes de nuestro país, pero primero votemos informados  y sigamos levantando nuestra casa en el árbol, para tener el telescopio y ver a distancia.